16 enero 2017

Laranjerias PR1


El sábado 14 de enero pasamos una buena jornada senderista por el Baixo Guadiana. Partimos de nuestro habitual lugar de encuentro, el Bar Consolación de Cartaya, y tras un corto y devagarinho trayecto en coche llegamos a Laranjeiras para repetir el trayecto que ya hicimos en marzo de 2011, el percurso pedestre de pequena rota PR1 Corre, corre...Guadiana, que con un recorrido de aproximadamente 8 km pasa por las localidades de Laranjeiras, Guerreiros do Rio, Álamo y Corte das Donas. En su mayoría seguimos sus marcas, con un par de variantes para evitar carretera y seguir por caminos.




El grupo de 10, algunos de los habituales no acudieron por causas de fuerza mayor, salió de Laranjerias hacia el S y nos dirigimos directamente a Guerreiros do Rio. El tramo hasta Álamo que antes se hacía por carretera, ahora es mucho más seguro y bonito por el campo.






Pasando por Álamo

Cuando pasamos por Álamo estaban de matanza de un cerdo en plena calle, nosotros seguimos las marcas para continuar la ruta y como en los altos el viento nos enfriaba, paramos con la protección de una loma para picotear algo de lo que llevábamos en la mochila y estando allí unos cazadores llegaron en una carrinha avisándonos que estaban de montería. Eso nos pone de nuevo en marcha ya que queremos salir rápido de la zona, donde algunos cazadores ya estaban apostados con sus escopetas esperando a algún pobre jabalí.



En la visita a  las ruinas del antiguo molino de viento de Corte das Donas, Salvador cuenta la historia del sillón de un barbero de Niebla, Fernando, que poseía uno antiguo (1910) marca Ford, por el que había recibido buenas ofertas económicas que no aceptó, pero pasado el tiempo los herederos del representante de la marca en España le llamaron para verlo y después le informaron que les interesaba para que formara parte de una colección que estaban proyectando en Barcelona. A cambio el barbero recibiría un sillón nuevo, una invitación a la inauguración de la colección y una estancia en la ciudad condal. Fernando es también senderista y un poco licántropo, porque le gusta caminar en la noche de luna llena de agosto.





Dejamos atrás la aldea de Corte das Donas por un camino perlado de flores y pronto comenzamos el descenso hacia el Barranco de Laranjeiras. Una vez abajo buscamos una zona soleada y hacemos otro alto para beber o picotear, lo que Pepe aprovecha para tomar unos apuntes rápidos en su cuaderno de dibujo.

una palomita para el dibujante


Barranco de Laranjeiras


Barcos en el Guadiana frente a Laranjeiras
Cuando llegamos a Laranjeiras era temprano para ir a comer y nos tomamos unas cervezas en el kiosco junto al río, esperando la llegada de las que vienen a  comer y que no pudieron estar durante el paseo.

La comida fue en la casa de pasto "Cantarinha do Guadiana", un sitio donde ya hemos comido varias veces y como siempre salimos satisfechos. Esta vez tuvimos que compartir el pequeño comedor con un grupo casi tan numeroso como nosotros. ¡Imaginad la bulla que pueden montar casi 25españoles comiendo! Durante la comida en una esquina de nuestra larga mesa, van surgiendo historias y recuerdos de nuestra vida en común, de viajes a Marruecos, de conciertos en el Gran Teatro, de amigos que nos dejaron, de amigos "plastas", pero también de olvidos y desmemorias.



Una vez más nuestro eficaz tesorero utilizó los remanentes sobrantes para que tan sólo tuviéramos que aportar 15€ por persona para los gastos de desayuno y comida.

Mis fotos del día en  https://drive.google.com/open?id=0B-9OSk8tkggqYmE1WVJyM1NqMk0
¡Gracias Pepe por la tuyas!